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El campeón Nelson Crispín, que con su 1,35 metros de estatura, es ganador de medalla de oro en natación en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020, habló en Mañanas BLU sobre lo que ha significado lograr conseguir esta presea, luego de tanto esfuerzo y superación personal.
En un regocijo total nos contó que vive un momento increíble, por lo que junto a todo su equipo sigue celebrando, "es una cosa de locos", expresó.
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La trayectoria que ha tenido en su vida para convertirse en el actual campeón, ha sido marcada, como la de muchos atletas, por la superación.
Cuando era niño a causa de su condición, sufrió de matoneo por parte de sus compañeros de colegio. Además, tiene primos que resaltan por su altura, siempre quiso ser como ellos.
Le diagnosticaron acondroplasia, acortamiento en algunos segmentos de su cuerpo, que para el caso de Nelson, era proporcional.
Hicimos exámenes y pruebas, para saber si me podían inyectar hormonas de crecimiento. Pero un endocrinólogo en Bucaramanga le dijo a mi mamá que no se podía. Podrían generar malformaciones.
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La recomendación médica, fue que se iniciara en el deporte y el baloncesto fue su primera opción. Sin embargo, al no ver que crecía, llegó al mundo de la natación gracias a que acompañaba a su hermano a entrenamientos. Fue allí donde su entrenador lo incitó a empezar en esta disciplina.
Tuvo que aprender a nadar y perderle el miedo al agua, cosas que logró superar y hoy lo tienen en lo más alto del mundo del deporte Paralímpico.
El mensaje de Nelson para aquellos que enfrentan cualquier tipo de limitación es que se inicien en el deporte.
A mi me cambió el deporte de mi vida, me ayudó a ver el mundo, a abrir los ojos a una perspectiva diferente.
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Escuche la entrevista completa:
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