Las fuertes lluvias que azotan al departamento de Santander han generado una grave emergencia en el municipio de Charta, donde al menos diez veredas han resultado afectadas por deslizamiento, daños en vías terciarias, viviendas y cultivos.
Desde hace ocho días, la alcaldía, con apoyo de maquinaria, adelanta labores de intervención para habilitar caminos y permitir que los campesinos puedan sacar sus productos agrícolas hacia los mercados de Bucaramanga.
Eduard Sánchez, director de la Oficina de Gestión del Riesgo de Charta, confirmó que las condiciones climáticas mantienen en alerta a los organismos de socorro.
"34 declararon la calamidad pública. La situación mantiene en máxima alerta a todos los organismos de atención de emergencia, dos personas fallecieron por descargas eléctricas", indicó Sánchez.
Veredas como El Puerto, Aguanegra, Pírita, La Caña, El Roble y Rinconada, se encuentran entre las más golpeadas por la ola invernal. En medio de la emergencia, los agricultores han tenido que ingeniárselas para mover sus cosechas. En uno de los casos más dramáticos, un camión cargado de alimentos estuvo a punto de caer a un abismo al intentar cruzar un tramo en mal estado.
También la situación ha obligado a suspender clases cada vez que llueve para evitar que niños y jóvenes arriesguen su vida cruzando quebradas crecidas que conectan las zonas rurales con el casco urbano.
Desde la istración municipal se han elevado solicitudes de apoyo institucional y recursos a la Gobernación de Santander y a la Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres, con el fin de atender la emergencia de manera efectiva y avanzar en soluciones, sin embargo, las lluvias no dan tregua y cada vez es más difícil atender las emergencias con maquinaria amarilla.
Las autoridades locales hicieron un llamado a la comunidad a evitar tratar de remover rocas o atravesar vías, pues todas se encuentran inestables y puede ocurrir una tragedia.