Audios y chats de estudiantes que planeaban un tiroteo en una escuela

Un grupo de alumnos de la Escuela de Educación Media N°4 de Ingeniero Maschwitz, en Buenos Aires, Argentina, organizó a través de WhatsApp un plan para realizar un tiroteo en su institución. Las conversaciones, reveladas en chats y audios, detallan cómo pretendían llevar adelante la masacre, incluyendo el tipo de armas a utilizar e incluso la intención de robar municiones de una comisaría cercana."Disparar a quien toque": los mensajes aterradoresEn un grupo titulado "Tiroteo escolar", integrado por unos 10 estudiantes de entre 13 y 15 años, los jóvenes discutían los pasos a seguir. Uno de los mensajes más escalofriantes señalaba: "Después de que matemos a los demás, hacemos un recorrido por la escuela para ver si quedó alguien con vida".Otro de los textos, dirigido a los participantes, advertía: "Acá no es que elijan a quién le van a disparar. Persona que ven, persona que le disparan. Si alguien se arrepiente, los disparos serán para ellos también". Además, intercambiaban información sobre armas: "La MP5 sirve para media y corta distancia, la Block para corta y la UZL 22 es corta", detallaba uno de los organizadores.Audio clave en el casoUna conversación telefónica entre dos de los implicados, incorporada como prueba judicial, revela la determinación de una de las jóvenes, quien aseguraba estar "100 % segura" de ejecutar el ataque el 13 de julio, fecha de su cumpleaños. Su compañero intentó disuadirlo: "Es mejor que no lo hagan, somos muy jóvenes", se escucha en los audio revelados por La Nación.El diálogo también expuso el plan para conseguir las armas: la adolescente mencionó que las tomaría de su padrastro. Al final, el chico se negó a participar, pero pidió permanecer en el grupo "para ver el chisme", a lo que ella replicó: "Te voy a sacar. Si no vas a estar, ¿para qué querés estar?".Ante la gravedad de los hechos, las autoridades educativas decidieron apartar a los involucrados del colegio, obligándolos a continuar sus estudios de manera remota por cuatro meses. La causa fue catalogada como "intimidación pública", sin embargo, las autoridades aun continúan investigando el caso.