Apenas comenzaba el segundo trimestre de 2025 cuando Annie Knight, modelo australiana de OnlyFans, afirmó haber alcanzado una de las metas más comentadas del año: tener encuentros sexuales con 1.000 hombres. La joven de 27 años, que ya había sorprendido al mundo en 2024 al declarar haber estado con 600 hombres, decidió superarse con un objetivo más ambicioso para el año siguiente.
La cifra final, según sus propias declaraciones a medios australianos, fue alcanzada en gran parte gracias a una convocatoria masiva que ella misma organizó. “Abrí un formulario para que cualquier hombre interesado se registrara”, explicó Knight. “Recibí cerca de 2.000 inscripciones. A todos les mandé la dirección y un horario”. El evento, que tuvo lugar el domingo anterior, contó con la participación de 583 hombres. “Con eso superé por mucho los 400 y pico que me faltaban para llegar a mi meta”, aseguró.
Knight detalló que las relaciones se realizaron en una sola jornada de seis horas. Para mantener condiciones de seguridad, exigió que se usara protección en todos los encuentros, y contrató personal encargado de supervisar que esta regla se cumpliera al pie de la letra. “Me sentí con poder, me sentí feliz. No me arrepiento de lo que hice. Todos se fueron con una sonrisa”, comentó, al tiempo que destacó la organización del evento y la disposición de los participantes.
Sin embargo, no todo fue positivo. Días después del maratónico encuentro, Knight compartió en sus redes sociales una imagen suya en bata hospitalaria, revelando que había sufrido una hemorragia considerable. “Supongo que 583 chicos en un día no es tan bueno para tu cuerpo”, escribió. Más tarde, explicó que tuvo que someterse a análisis de sangre y otras pruebas médicas debido al sangrado persistente. También recordó que padece endometriosis, una condición médica que puede agravar los efectos físicos tras esfuerzos intensos.
A pesar de las complicaciones médicas, Knight considera que ha cumplido con éxito su propósito del año. Su caso ha provocado intensos debates en redes sociales y medios, no solo por la cifra alcanzada, sino también por el enfoque que da a su trabajo en la industria de contenido para adultos. La modelo insiste en que esto forma parte de su carrera profesional y que lo hace con plena consciencia y control sobre su cuerpo y decisiones.
Este caso vuelve a poner en discusión los límites entre el empoderamiento sexual, la salud física y las formas en que el contenido para adultos se profesionaliza en la era digital. Knight, fiel a su estilo directo, concluyó que no cambiaría nada de lo que hizo. “Esto es parte de mi vida y de mi trabajo”, sentenció.