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El Granada tomó una importante ventaja ante el Nápoles italiano en la eliminatoria de dieciseisavos de final de la Liga Europa al vencer este jueves por 2-0 en el Estadio Nuevo Los Cármenes en el partido de ida.
Los goles marcados por el venezolano Yangel Herrera y por el brasileño Robert Kenedy, en apenas dos minutos en el primer cuarto de partido, permitieron a un notable Granada vivir de las rentas en el segundo tiempo ante un decepcionante Nápoles que creó muy poco peligro.
El Granada mandó en el partido en los primeros minutos, con una buena jugada personal de Kenedy, muy activo desde el principio, que no llegó a completar Jorge Molina en boca de gol.
Otra acción por la banda derecha del ataque rojiblanco, en esta ocasión del francés Dimitri Foulquier, estuvo a punto de convertirse en gol al cuarto de hora, pero lo evitó el meta italiano Alex Meret.
El dominio andaluz se transformó en dos goles seguidos en apenas dos minutos justo antes del ecuador del primer tiempo, el 1-0 marcado de cabeza por Yangel Herrera tras un centro perfecto de Kenedy, y el segundo firmado por el propio Kenedy al finalizar una gran contra muy bien llevada por el venezolano Darwin Machís.
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El Nápoles se vio 2-0 abajo en un abrir y cerrar de ojos, y trató de reaccionar tras un inicio en el que se mostró dubitativo y errátivo, aunque ni el disparo lejano del macedonio Eljif Elmas y ni el centro chut del portugués Mario Rui encontraron portería.
La velocidad del Granada hizo mucho daño ante las pérdidas de balón de los italianos en la medular, y en otro contragolpe local Jorge Molina estuvo muy cerca de aumentar la ventaja con un remate de espuela.
El nigeriano Victor Osinhen, ya en el tiempo añadido, firmó la última llegada antes del descanso de un Nápoles que no disparó en el primer tiempo entre los tres palos de la meta defendida por el portugués Rui Silva.
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El cuadro italiano controló más el balón en el segundo tiempo ante un Granada siempre bien asentado sobre el campo y que tampoco renunció a la posesión con un magistral Ángel Montoro como líder de los suyos.
El polaco Piotr Zielinski disparó a la hora de juego desde una buena posición para marcar, pero tuvo el punto de mira desviado, igual que poco después Lorenzo Insigne en un lanzamiento directo de falta.
La ocasión más clara del Nápoles, cada vez más volcado con el paso de los minutos, llegó a balón parado con un cabezazo del serbio Nikola Maksimovic desde al área pequeña que se marchó fuera.
Replicó el Granada, que aguantó bien los envites de los napolitanos, con un chut lejano de Montoro que también se fue desviado y con una contra bien cerrada por Antonio Puertas con un tiro que rechazó Maksimovic.
La primera parada, y única, de Rui Silva en el partido llegó en el minuto 86 tras un tiro de Osinhen.
Pese al empuje visitante el choque acabó con dos claras ocasiones del Granada, que rozó en el añadido el 3-0 con un remate de Yangel Herrera ante el que se lució Meret y, poco después, con un cabezazo fuera de Jorge Molina.
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