Para los colombianos no es muy común, en algunos casos, que elementos como las crestas y garras de los pollos y gallinas sean utilizados en la gastronomía local. Sin embargo, sí hay un mercado preferido para estos productos y es en el otro continente, en China. De acuerdo con el presidente de Fenavi, la Federación Nacional de Avicultores, Gonzalo Moreno, productos como las garras, las crestas y hasta las puntas de las alas, son apetecidos en ese país. Así como cuando va a un restaurante, y de entrada pide alistas bbq, los chinos piden solos las puntas de esas alitas como acompañamiento en un coctel.
"Las garras. Usted llega a un restaurante y en vez de entrar, nosotros pedimos unas alitas de pollo y ellos piden sus garras. En el caso de usted, por ejemplo, acompañar un trago, ellos lo que hacen es comerse las puntas de las alas o las crestas de los pollos o de las gallinas. Entonces es, imagínese usted, nosotros al año producimos mil millones de aves en Colombia. Ellos sacar mil millones de crestas es muy complicado. Toca llenar los contenedores para poderlos mandar y conseguir también oferta de esto a nivel mundial”, afirmó el presidente de Fenavi, Gonzalo Moreno.
Entre tanto, el presidente de la federación, esto hace parte del reconocimiento que el sector le hace al mercado internacional al cual Colombia debe explorar para lograr un comercio equilibrado. Así las cosas, hay cifras importantes para resaltar desde el sector. En temas de exportación, para el 2025 la meta es llegar a 100 contenedores de huevo para exportación hacia el caribe. De acuerdo con las cifras presentadas, existe la capacidad para aumentar a 1.000 millones de huevos al año. Y no solo el huevo, sino productos como la carne de pollo podrían llegar a las 350.000 toneladas.
Así las cosas, lo que piden desde los sectores productivos es que el gobierno colombiano se encargue de abrir los mercados, ya que al momento es una situación pesa más la viabilidad sanitaria que las condiciones arancelarias. Por lo cual, el mensaje para el presidente, es que "abrir mercados debería ser una política de Estado".