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El reciente hallazgo del cuerpo sin vida de Sofía Delgado, una niña de tan solo 12 años que había desaparecido el 29 de septiembre en Candelaria, Valle del Cauca, ha conmocionado a toda Colombia. El trágico desenlace de este caso ha despertado indignación, tristeza y una creciente demanda de justicia. La comunidad exige respuestas, mientras que las autoridades trabajan incansablemente para esclarecer los detalles y castigar a los responsables.
Sofía Delgado salió de su casa en Candelaria con el simple propósito de comprar champú para bañar a su mascota, pero nunca regresó. Durante 19 días, su familia vivió una angustiosa búsqueda con la esperanza de encontrarla con vida. La comunidad local, junto con las autoridades, se unió en oraciones y vigilias, manteniendo viva la fe de que la niña regresaría sana y salva. Sin embargo, esa esperanza se desvaneció con el hallazgo de su cuerpo en un cañaduzal en el caserío de Villagorgona, una zona rural del mismo municipio.
El descubrimiento del cuerpo fue informado por las autoridades judiciales y rápidamente se inició el proceso para confirmar su identidad mediante estudios forenses en el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Las primeras investigaciones apuntan a que Sofía fue víctima de un brutal asesinato, lo que ha generado una ola de indignación y repudio en todo el país.
La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, expresó su profundo dolor por lo ocurrido y pidió justicia para Sofía. En su cuenta oficial de X (anteriormente Twitter), manifestó su solidaridad con la familia de la menor y reiteró su compromiso de hacer todo lo posible para que los responsables sean castigados con todo el peso de la ley.
Además, la gobernadora aprovechó este trágico hecho para reabrir el debate sobre la implementación de la cadena perpetua para los asesinos de niños en Colombia. "Una persona que maltrata, que agrede, que violenta, que asesina a un niño merece ser excluida de la sociedad", enfatizó en su declaración.
Por otro lado, el alcalde de Candelaria también lamentó profundamente lo sucedido y afirmó que no descansarán hasta que se haga justicia. Las autoridades locales, junto con las fuerzas de seguridad, han intensificado los esfuerzos para esclarecer este caso y llevar a los responsables ante la justicia.
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El avance en la investigación ha llevado a la captura de dos personas sospechosas de estar involucradas en el crimen: un hombre y una mujer, quienes son esposos y propietarios de un negocio cercano a la vivienda de Sofía. Según las declaraciones de la gobernadora Toro a medios locales, las primeras hipótesis sugieren que la niña desapareció en las inmediaciones de este establecimiento.
Tras la captura de los sospechosos, la comunidad de Villagorgona mostró su frustración y rabia, al punto de intentar incendiar la vivienda de los detenidos. Para controlar la situación, fue necesaria la intervención del grupo antidisturbios de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (Udmo), conocido anteriormente como Esmad. El ambiente en la zona sigue siendo tenso, y la comunidad exige respuestas rápidas y contundentes por parte de las autoridades judiciales.
La familia de Sofía Delgado ha quedado devastada tras conocer el trágico destino de la niña. En medio del dolor, su madre, Lady Zúñiga, expresó su deseo de que Dios haga justicia por lo sucedido. Entre lágrimas, recordó que tanto ella como su esposo, Cristian Delgado, siempre mantuvieron la esperanza de ver a su hija con vida, pero ese milagro nunca llegó.
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"Estamos rodeados de gente mala, de gente con máscaras que no tienen amor en el corazón", dijo Lady Zúñiga, visiblemente afectada por la pérdida de su hija. Su testimonio refleja el profundo impacto emocional que este crimen ha causado en su familia y en toda la comunidad.
Este lamentable caso se da en un momento crítico, cuando Colombia está a punto de ser anfitrión de la Primera Conferencia Ministerial Mundial para Poner Fin a la Violencia contra la Niñez, que se celebrará en Bogotá los días 7 y 8 de noviembre. Este evento, organizado por el gobierno colombiano junto con Suecia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef, reunirá a delegaciones de 116 países para discutir estrategias y políticas que aborden la violencia infantil a nivel mundial.
El asesinato de Sofía Delgado es un doloroso recordatorio de los desafíos que enfrenta Colombia en la protección de sus menores. La violencia contra los niños y niñas sigue siendo una realidad devastadora, y la sociedad clama por cambios urgentes que garanticen su seguridad.
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