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Con más de 42.000 espectadores en el estadio Atanasio Girardot, la mayoría vestidos de rojo, el clásico paisa número 321 fue un verdadero espectáculo de emociones, polémicas y heroísmo.
Independiente Medellín, con apenas ocho jugadores en los minutos finales, logró un empate agónico 1-1 frente a Atlético Nacional, gracias a un gol del brasileño Marcus Vinicius que desató la locura en las tribunas.
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Desde el pitazo inicial, ambos equipos salieron con lo mejor de sus nóminas. Nacional, con la única baja de Marino Hinestroza, mostró intensidad y presión alta. Medellín, por su parte, intentó mantener el orden, pero pagó caro un error defensivo en el minuto 37.
Tras una revisión de tres minutos en el VAR, el árbitro Andrés Rojas sancionó penal por un empujón con el codo de Homer Martínez sobre Billy Arce. Edwin Cardona cobró con potencia y abrió el marcador para los verdolagas.
El juego cambió drásticamente en el segundo tiempo. Francisco Chaverra, con una acción innecesaria, dejó a Medellín con diez tras un codazo a Dairon Asprilla en el 53’. Y la situación empeoró cuando Leyser Chaverra se lesionó sin posibilidad de reemplazo, obligando al equipo rojo a jugar con nueve. Aun así, el “Poderoso” no se rindió.
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La recompensa llegó en el minuto 88, cuando Marcus Vinicius aprovechó un descuido defensivo y marcó el empate con suspenso: Mender García, en posición adelantada, por poco interviene en la jugada, pero el tanto fue validado.
El final fue caliente. Un fuerte cruce entre Jorman Campuzano y Brayan León terminó con ambos expulsados, dejando a Medellín con ocho hombres en cancha. Pese a todo, el equipo de Alfredo Arias resistió y selló un empate que sabe a victoria.
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