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Después de los presuntos casos de abuso sexual que se presentaron en la escuela Marco Fidel Suárez del barrio Manrique San Pablo, en Medellín, los padres de familia protestaron a las salida del colegio pidiendo justicia y acusaron a uno de los vigilantes de ser el presunto responsable.
“No solo han pasado dos casos, sino que han habido muchos más. Lastimosamente otras madres, como otras tres o cuatro, están en estos momentos en el médico viendo si sus niños también fueron abusados”, aseguró Daniela Vanegas, una de las representantes de los padres de familia de la institución.
Los directivos, autoridades y representantes de los padres de familia se reunieron para que la Policía empezara una investigación y así poder dar con los responsables.
La Personería Distrital de Medellín confirmó que se comenzó una indagación previa en contra de los funcionarios del colegio. De acuerdo al artículo 208 de la Ley 1982, la idea es penalizar de forma individual a los responsables de estos hechos y aclarar en que se pudieron incurrir por parte de servidores de la I.E.
Por su parte, la Secretaría de Educación de Medellín se comprometió a desarrollar cursos con los docentes para saber cómo tratar estos casos. Además, tendrán una feria de servicios con especialistas, en donde podrán participar padres, niños y jóvenes en temas psicológicos y de salud.
“Desde Secretaria de Educación estamos activando todas las rutas que tenemos a nuestra disposición, así como el acompañamiento psicosocial como jurídico para las familias y estudiantes afectados por estos presuntos casos de abuso”, aseguró Juan David Agudelo Restrepo, subsecretario de la Secretaría de Educación de Medellín.
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Según reportes de la autoridades, el primer caso conocido ocurrió en mayo, pero solo hasta el 28 de julio fue denunciado por la madre de la víctima.
Mientras que, el otro caso se dio a conocer a principios de agosto, según la concejal Nataly Vélez, la mamá del segundo niño, de 5 años, “se encuentra con su menor bajo atención médica”.
Los padres de familia piden que este caso no quede impune, ante la falta de pronunciamiento por parte del rector piden justicia por lo ocurrido. Los allegados esperan que la situación no quede en el olvido como le pasó a Manolo, un niño que fue abusado en el barrio Santa Cruz de Medellín.
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“Varias mamás estamos con nuestros niños y no queremos llevarlos a estudiar, pues no nos parece que estén actuando de la mejor manera. Nos dicen que desde el viernes el rector está informado y sentimos que desde ahí debieron mandarnos un comunicado con el cierre del colegio, ya que, nuestros hijos son los que están expuestos”, afirmó Carolina, una de las madres asistentes al plantón.
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