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En aulas temporales, donde azota el calor en época de verano y la lluvia los inunda durante el invierno, han tenido que dar sus clases los estudiantes de Providencia, pues el huracán Iota destruyó sus colegios y cuatro años después los gobiernos aún no cumplen con la reconstrucción de estos planteles educativos.
La situación mantiene agobiados a los isleños, quienes salieron con pancartas en manos a protestar una vez más para exigir tanto la reconstrucción de la institución Educativa María Inmaculada, como la terminación de las obras inconclusas del colegio Junín.
"Nuestros niños están sufriendo mucho con el calor y la lluvia, porque aquí llueve de forma lateral, el agua entra y no permite que los niños puedan recibir una educación de calidad como se lo merecen", expresó Johana Peñaloza, madre de familia.
Debbie Archbold Paez, secretaria de infraestructura y servicios públicos de Providencia, explicó que la reconstrucción del colegio María Inmaculada estará a cargo del Ministerio de Cultura, ya que el plantel es un patrimonio de la Nación.
"El 31 de octubre se firma la protocolización y, pues, me imagino que ellos vendrán acá con el cronograma para decirnos a partir de cuándo va a iniciar la reconstrucción", dijo la funcionaria.
"El Ministerio del Interior es garante y realizará el respectivo seguimiento, al igual que la istración municipal y la departamental", agregó.
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En cuanto al colegio Junín, la secretaria agregó que se están adelantando estudios para poder determinar el estado real de la obra y darle continuidad y terminación a la misma.
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