Mientras el hombre que incendió las oficinas de la EPS Cajacopi en Maicao (La Guajira) está a la espera de que este viernes la Fiscalía le impute cargos y un juez decida si lo envía o no a la cárcel por estos hechos; su hijo de 9 años, por quien reclamaba una atención más eficaz por parte de la EPS, será recibido en Barranquilla para someterse al procedimiento que requiere.
Cajacopi informó que tramitó la atención con subespecialistas en la Fundación Oftalmológica del Caribe en Barranquilla, “lográndose agendar una cita para este 30 de mayo, a las 8:25 a. m., para una posible intervención”.
Agregó la entidad que a su vez ha estado coordinando los “traslados correspondientes” para garantizar que el niño pueda estar presente en Barranquilla y acudir a su cita.
Al parecer, la familia del menor llevaba "varios meses" esperando por la autorización de trámites asociados a un tratamiento para evitar que este pierda la vista por uno de sus ojos, luego de haber sufrido un accidente casero.
En medio de esto, el niño habría recibido una cita para una cirugía el pasado miércoles en Barranquilla, sin embargo, el viaje nunca pudo ser realizado desde Maicao, debido a que la EPS no autorizó el viaje en la ambulancia, lo que desató la ira de su padre que lo llevó a incendiar la sede, en un hecho que lo tiene bajo custodia de las autoridades.
Aunque no se han establecido los cargos que enfrentará el papá del niño ante la justicia, no se descarta que la Fiscalía lo impute, no solo por daño en bien ajeno, sino por intento de homicidio, pues al momento de provocar el incendio varias personas se encontraban dentro de las oficinas de la EPS.