La decisión muestra un giro en el proceso de esta reforma, que ha sido uno de los proyectos bandera del Gobierno Nacional, pero que enfrenta serios desafíos por los tiempos ajustados y las divisiones políticas.
Tras el hundimiento de la propuesta alternativa, la atención se centra ahora en la ponencia mayoritaria, que será la que se discuta y vote en este tercer debate. Esta versión del proyecto cuenta con el respaldo de senadoras como Angélica Lozano, junto con otras cinco congresistas, y plantea un enfoque más moderado en comparación con la propuesta inicial impulsada directamente por el Ejecutivo.
La reforma laboral fue revivida hace pocos días en el Senado tras haber quedado archivada. Aunque el Gobierno sigue apoyando la necesidad de una transformación del sistema laboral, la nueva versión que se debate actualmente no convence del todo al ejecutivo, que considera que algunos de sus puntos esenciales han sido diluidos.
A pesar de las tensiones, el tiempo apremia. El proyecto debe superar este tercer debate para alcanzar su último paso antes del cierre de la actual legislatura. Si no se aprueba en los próximos días, la reforma laboral podría volver a quedar en el limbo.
Uno de los puntos que más fue criticado acerca de esta ponencia de la senadora Avella es que no se acoplaba a los acuerdos de la Cámara de Representantes que estuvo trabajando en un texto por más de dos meses. Revivía por ejemplo el recargo nocturno a partir de las 6pm, recargo dominical y festivo 100%, entre otros.