Luego de la radicación de la ponencia de archivo de la reforma laboral con ocho firmas de los catorce integrantes de la Comisión Séptima del Senado de la República, el presidente Gustavo Petro ha enfilado sus críticas en contra de estos congresistas a los que ha calificado de "traidores".
“La Comisión VII en su mayoría ha traicionado al pueblo trabajador de Colombia. Buscaremos que sea reversible la decisión, pero el engaño solo nos lleva a la violencia. Que el pueblo trabajador de Colombia sepa quiénes fueron los que lo han traicionado (…) Con esta actitud de la mayoría de la Comisión VII rompen el dialogo entre el Congreso de Colombia y el Gobierno del Cambio”, escribió el primer mandatario en su cuenta de X.
Ante esto, el presidente del Congreso, el senador conservador Efraín Cepeda, criticó las amenazas del jefe de Estado.
“El Congreso de Colombia es un poder público independiente, no es apéndice de nadie, mucho menos de la Presidencia de la República. Y los senadores de la Comisión Séptima tomaron una decisión autónoma de hundir la reforma. Esa es una decisión que tenemos que respetar, porque no es posible que cuando hay votos positivos se aplaude y cuando hay votos negativos se habla de violencia, de echar el pueblo a la calle”, enfatizó el conservador.
El senador Cepeda recordó que aunque el presidente Petro ganó con un amplio margen, el Congreso obtuvo más votos como representantes del pueblo.
“Este Congreso sacó 22 millones de votos, tiene una legitimidad absoluta y los de cada comisión son autónomos en sus determinaciones”, añadió.
Cepeda rechazó las presiones del primer mandatario, pero también la presión por parte de manifestantes auspiciados por congresistas de la bancada de Gobierno, quienes entraron al recinto del Congreso para lanzar arengas y gritos contra los senadores opositores a la reforma, ya que esto podría constituir un riesgo para la vida de los congresistas.
“Lo que sucedió hoy es repudiable (…) varias senadoras estuvieron allí confinadas en una oficina y el hecho es, como ellos lo calificaron, intimidación. (…) Tuve que conversar con el director nacional de la Policía para pedirle protección por ellos, pero más peligrosos y más repudiables son los trinos del presidente Petro, hablando de violencia. Eso pone en peligro a los congresistas, en este caso a los de la Comisión Séptima y a sus familias, para la cual nos vamos a dirigir a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. A este poder se le respeta, a este poder del Congreso de la República, uno de los tres poderes legislativos”, agregó.
El senador conservador concluyó su intervención señalando que el Congreso es un poder independiente y que amenazar con violencia es lo peor para la democracia colombiana.