En diálogo con Mañanas Blu, el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, habló sobre reforma laboral que ha suscitado una gran controversia en el Congreso.
Sanguino entregó detalles de su participación en un encuentro nacional de laboralistas convocado por la Andi, donde discutió aspectos cruciales relacionados con la reforma laboral y la posición del gobierno frente a la consulta popular, que de hecho fue hundida anoche en el Congreso.
Reforma Laboral
Según el ministro Sanguino, el gobierno ha estado comprometido con la reforma laboral desde el año pasado, buscando establecer una legislación que beneficie tanto a los trabajadores como a los empresarios.
"Para nosotros es secundario el mecanismo, nosotros lo que queremos es que haya una reforma laboral y en eso hemos insistido desde el año pasado”, dijo.
"Lo que queremos es que haya una reforma laboral y en eso hemos insistido", agregó Sanguino, destacando los esfuerzos del gobierno por coordinar con centrales sindicales y gremios de producción para llegar a un consenso.
Críticas al congreso y futuro de la consulta popular
El ministro Antonio Sanguino criticó abiertamente al Congreso por no haber convocado de manera efectiva las comisiones conjuntas para discutir otros proyectos de reforma.
"El Congreso tiene una responsabilidad con el país, y el país tiene que exigirle al Congreso que aborde los debates pendientes", enfatizó, indicando que los tiempos son críticos y que quedan sólo cinco semanas para definir el futuro de la reforma laboral.
A la pregunta de si el gobierno está dispuesto a desactivar la consulta popular si se logra una conciliación en el Senado, Sanguino destacó la apertura a un diálogo constructivo, siempre que esto garantice condiciones justas para trabajadores y protección al aparato productivo.
Movilización social
La conversación también giró en torno a cómo la aprobación o rechazo de la reforma podría impactar las movilizaciones sociales.
Aunque el gobierno no convocará huelgas, se generó un debate interesante sobre la autonomía de los sindicatos a la hora de decidir sobre acciones de movilización. Sanguino dejó claro que esa decisión corresponde exclusivamente a los sindicatos, pero la insatisfacción entre los trabajadores es palpable.
Escuche aquí la entrevista: