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A seis días de las elecciones regionales, crece la incertidumbre en materia de seguridad, tras varios hechos violentos ocurridos en las últimas horas.
Hoy la principal amenaza en materia de seguridad frente a las elecciones, la protagonizan las disidencias de alias 'Iván Mordisco', cuyos hombres en teoría están en cese de operaciones violentas desde hace una semana.
Frente a esa realidad que estaría detrás del secuestro de 18 soldados en Guaviare, así como de los robos y humillaciones a 30 soldados en Briceño, Antioquia y del asesinato de dos policías en Toribío, Cauca, la situación más preocupante radica en que no hay un mecanismo de verificación del cese del fuego y por lo tanto, en la práctica ese grupo hoy tiene una preocupante “carta blanca” para amedrentar a la población civil.
No en vano las advertencias de las autoridades electorales, en particular desde la Registraduría que ha venido insistiendo en la necesidad de contar con un plan robusto de seguridad para cada rincón de Colombia.
A propósito, hoy el ministro del Interior Luis Fernando Velasco entregará el más reciente reporte al país tras reunirse con el Comité de Garantías Electorales, para explicar entre otras cosas, el decreto firmado el pasado viernes que plantea las reglas de juego para las elecciones del 29 de octubre, con una ley seca nacional entre el sábado 28 de octubre a las 6 de la tarde y el lunes 30 de octubre a las 6 de la mañana y un artículo que abre la puerta para facilitar el traslado de mesas de votación, en caso de graves alteraciones de orden público.
No es gratuita la preocupación por la seguridad en torno a las elecciones: la Procuraduría, la Defensoría del Pueblo y otras instituciones han alertado sobre el nivel máximo de riesgo de violencia y constreñimiento armado a los electores en 143 municipios del país, más del 10 por ciento del total de municipios de Colombia.
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A esto se agrega el resultado del juicioso ejercicio que hace la Misión de Observación Electoral que hoy revela que la violencia contra candidatos ha aumentado en cerca de un 38 por ciento durante la actual campaña frente a las elecciones regionales de 2019.
El gobierno del presidente Gustavo Petro tiene un enorme reto para garantizar que las elecciones en Colombia transcurren en paz, entre otras cosas en una dura prueba para revelar ante el país si casi 15 meses después de haber llegado al poder, hay o no mejores condiciones de seguridad y si hay algún resultado que mostrar de su política de paz total.
Aquí la opinión de Ricardo Ospina:
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