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Después de 16 años de obras se puede decir que Colombia tiene una doble calzada compuesta de túneles, puentes y vía libre para atravesar la Cordillera Central. Este lunes la inaugurará el presidente Iván Duque. BLU Radio hizo ya el recorrido por los 30 kilómetros arrancando desde Cajamarca en Tolima, los vehículos que suben hacia el alto de La Línea utilizarán, a partir de ahora, la vía antigua y los que bajan, provenientes del Quindío, lo harán por la doble calzada nueva.
“30 kilómetros para pasar esta cordillera es algo beneficioso para todos, para los compañeros que la necesitamos hace mucho tiempo”, dijo Carlos Vargas, un transportador de carga.
Son 60 obras en total, 31 puentes, 25 túneles y los 3 intercambiadores: Versalles, Américas y Bermellón. En 2005 arrancó el proyecto con la excavación del túnel piloto y aunque la visión siempre fue atravesar la cordillera central, la megaobra tuvo innumerables problemas e incumplimientos, por ende retrasos, mala calidad y desfinanciación. En 2018 estaba frenada en un 54%.
“Se dieron tantos problemas que desde el año 2016 hasta el año 2018 la obra estuvo paralizada. El presidente Iván Duque llegó con el propósito de concluir los proyectos estratégicos y el más importante era este, el cruce de la Cordillera Central y se comprometió con refinanciarlo. Puso 620.000 millones de pesos adicionales para la obra”, dijo en diálogo con BLU Radio el director del Invías, Juan Esteban Gil.
Esta es, sin duda alguna, una de las obras más esperadas por los colombianos. El país, atravesado por 3 cordilleras, siempre necesitó este proyecto vial para conectar importantes regiones como Buenaventura con el centro del país.
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Entonces, hacia el Quindío subimos por la vía existente usando los dos carriles desde Cajamarca llegando al alto de La Línea, en el que se alcanzan los 3.265 metros sobre el nivel del mar. El descenso desde el sector de Américas hasta Calarcá, Quindío, es por la vía nueva de doble calzada. El máximo de velocidad en todo el recorrido es de 60 kilómetros por hora.
Otro transportador de carga le contó a BLU Radio que lo que más se sufría eran los interminables trancones cuando había un varado o un accidente en una sola vía angosta que tenía doble sentido.
“Lo que más lo perjudica a uno es cuando se vara un carro, con doble calzada el carril izquierdo o derecho se puede avanzar y no hay trancón, que a veces eran hasta de 2 o 3 días según la varada”, dijo a BLU Radio Óscar Becerra.
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Al regreso, en el sentido Armenia-Ibagué, subimos por la vía existente, llegamos al Túnel de La Línea por el que ya han cruzado más de 1.500.000 vehículos desde su apertura en septiembre de 2020, atravesamos los 8,6 kilómetros y bajamos por la vía nueva pasando por los puentes que llevan los nombres de la Floray, los túneles de la fauna que habita esta cordillera.
“Hice oficios varios, cunetas, alcantarillas, amarrando hierro en el puente. Muchas veces nos tocaba doblar turno, hacer jornada continua. No pensábamos que íbamos a llegar hasta el fin porque esto fue una lucha larga no solo para nosotros sino para los ingenieros, capataces, los altos mandos y ya que la vemos terminada es un orgullo haber participado en esta obra”, indicó Julio César Guevara, quien cumplió dos años trabajando en este proyecto en toda clase de labores de construcción.
Dice Julio César que muchas veces pensaron que no se iba a lograr por la complejidad de atravesar la imponente cordillera.
Mientras unos celebran, otros dicen que la puesta en marcha de la doble calzada no los beneficia, este el caso de los pequeños comerciantes de la zona que literalmente sacaban provecho de los trancones.
“Beneficio ninguno, porque las ventas bajan por mitad, ¿Qué beneficio vamos a recibir?. Las ventas no son lo mismo, porque digamos que este negocito aquí era el paradero de ellos, allí amanecían durmiendo, bajando y subiendo, nos beneficiaba el trancón”, afirmó Juan de Jesús Lezama, comerciante en el sector de Calarcá, Quindío.
En cuanto a los peajes, es uno por trayecto: Del lado Quindío, por el intercambiador Américas, se paga el peaje antes de entrar al túnel de La Línea. Del lado Tolima, por el intercambiador Bermellón, el peaje queda antes de tomar la vía conocida como Alto de la Línea. 2.9 billones de pesos se invirtieron en las 60 obras y algunos trabajos van a continuar, especialmente, en los puntos que necesitan estabilización, como por ejemplo los kilómetros 37 y 39 en el sector de Bellavista, Tolima, que eran algunos de los puntos críticos.
El proyecto Cruce de la Cordillera Central ha tenido en total 24 contratos (13 de obra y 11 de interventoría) y con la puesta en marcha de esta mega obra se proyecta una reducción del 95% de los accidentes en la vía, ahorros en costos de operación y logística del transporte por más de $250.000 millones anuales, un mayor desarrollo económico del Eje Cafetero y se generan más de 150 nuevos empleos permanentes.
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