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Mañanas Blu 10:30 A.M. conoció la resolución del 9 de mayo del 2025 firmada por el director de la Unidad de Protección, Augusto Rodríguez, en el que se señala que como resultado de “la validación del nivel de riesgo como ORDINARIO, emitida por el Comité de Evaluación del Riesgo y Recomendación de Medidas – CERREM” a la hija mayor de la exconsejera presidencial de regiones Sandra Ortiz, testigo clave en el escándalo de corrupción de la UNGRD, se ordena la finalización del esquema de seguridad con el que contaba la joven de 24 años.
A pesar de que el documento está fechado del 9 de mayo, la notificación de la remoción del esquema de seguridad se dio a las 11:40 p.m. de este 30 de mayo.
El documento ordena remover el “esquema de protección tipo uno conformado por un (1) vehículo convencional y dos personas de protección", así como la remoción de un chaleco blindado.
La gravedad de esta decisión radica en que esta semana, además, este medio reveló que laFiscalía le negó la protección a los dos hijas de la exsenadora. Con las dos desiciones, tanto la joven de 24 años, como la menor de 13 se encuentran totalmente desprotegidas, en el contexto de tener a su mamá detenida y envuelta en un caso de corrupción que involucra a los más poderosos del país. Entre esos, quien fungió como director de la Agencia Nacional de Iteligencia y exdirector del Dapre, Carlos Ramon Gonzalez; el expresidente del Senado Iván Name y el hoy magistrado de la Corte Constitucional, Vladimir Fernández.
El 23 de mayo, según conoció Blu Radio, la Fiscalía finalmente negó la solicitud de seguridad que había hecho la defensa de Sandra Ortiz, tres meses después de que el ente acusador a ofreciera. La defensa y la propia Ortiz interpretaron esta decisión como otra muestra de la falta de garantías en el proceso. Por esta razón, la exconsejera —quien fue citada a rendir testimonio en la Corte Suprema el pasado lunes 26 de mayo en el proceso que adelanta el magistrado Francisco Javier Farfán contra el expresidente del Senado Iván Name— optó por guardar silencio.
El ente acusador también señala que después de la evaluación de riesgo de las hijas de Ortiz, se concluyó que no hay un riesgo extremo.
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Cabe recordar que el de 9 de mayo de este año Mañanas Blu10 AM habló con el abogado de Ortiz, el penalista Oswaldo Medina, quien señaló que, debido al proceso judicial, el nivel de riesgo de su defendida se elevó a extremo, por ende el de sus hijas. Aseguró que el 15 de marzo, “se comunican los directores de la unidad de protección de la Fiscalía y le ofrecen a su hija menor un esquema de protección, porque actualmente no tiene. Es una niña de 12 años, que vive con su papá. Ellos están divorciados, pero vive con él porque Sandra, naturalmente, está detenida”.
A renglón seguido, Medina afirmó que la defensa esperó mes y medio a que se materializaran “las medidas de protección, medidas que nunca llegaron”.
Describió como “terrible” el estado de angustia y vulnerabilidad en el que se encontraba Sandra Ortiz por la seguridad de sus hijas. Según el abogado, la vio “quebrada en llanto”, preocupada por no saber qué podía ocurrirle a su hija menor.
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Hoy, no solo no llegaron las medidas de seguridad de la Fiscalía, sino que la Unidad Nacional de Protección retiró el esquema de seguridad a su hija mayor.
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