Este martes, después de lunes festivo, da inicio una semana corta y decisiva para la reforma tributaria del Gobierno de Gustavo Petro. El texto llegará a los dos debates que le faltan en las plenarias de Cámara y Senado y esa es la razón por la que distintos partidos están con lupa en mano revisando el articulado con el fin de definir qué apoyan y qué no.
La llamada aplanadora del Gobierno Petrose impuso en las comisiones terceras, donde pudo ser aprobada de una sola sentada, para muchos “a pupitrazo limpio”. Ahora, en el momento decisivo para el proyecto, no va a estar tan fácil para a la actual istración le aprueben todo lo que quiere.
La preocupación la tienen todos los partidos, no solo los de oposición. De hecho, uno de estos es el Partido Liberal, de los más grandes en el legislativo, de mayor peso y que está declarado como partido de Gobierno.
Los liberales suman 14 votos en el Senado (13 actualmente, sin el preso senador Mario Castaño) y 33 en la Cámara.
El expresidente Gaviria estudió el proyecto de reforma y manifestó que no le parece que este sea el momento para sacar adelante una reforma como esa.
El expresidente quedó tan preocupado, que convocó a su bancada a una reunión para esta tarde; senadores y representantes están citados a las 6:00 de la tarde de este martes en su apartamento, en el barrio Rosales, norte de Bogotá.
La petición de Gaviria a la bancada será no acompañar el proyecto,pero si por los compromisos adquiridos y la dinámica del debate la votan a favor, les pedirá que impidan que se mantenga la meta de recaudo actual.
La meta ya fue modificada porque inicialmente había sido fijada en 25 billones de pesos, pero el Gobierno cedió un poco y actualmente está proyectado en 22 billones de pesos.
El expresidente Gaviria sugiere, por su parte, que sea de máximo 10 billones de pesos, algo que por supuesto no le va a gustar al ministro de Hacienda porque significa bajarse de más de la mitad de esa meta.
Sin embargo el Partido Liberal no es la única colectividad que duda de la tributaria. En el Partido Conservador, Blu Radio conoció que también hay inquietudes e inconformidades. A esto se suman los partidos Cambio Radical y el Centro Democrático, que ya anunciaron que votan en contra.
La reforma tributaria, así las cosas, se convirtió en el verdadero pulso y prueba de fuego para el Gobierno, hasta el momento muy cómodo con las mayorías parlamentarias.
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