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Desde el 5 hasta el 21 de octubre se realizará en Colombia la Copa Libertadores Femenina. Serán 16 equipos, divididos en cuatro grupos, que buscarán llegar hasta la final para conquistar el título más importante de clubes en Sudamérica.
Pero la Copa Libertadores Femeninano solo son los partidos que se jugarán en el estadio Metropolitano de Techo, en Bogotá, o en el Pascual Guerrero, en Cali, es una ventana para las niñas y jóvenes que ven en el fútbol una oportunidad para cumplir sus sueños y sacar a sus familias adelante.
En un conversatorio realizado en Bogotá, la arquera Vanessa Córdoba y la exfutbolista Nicole Regnier contaron sus experiencias en sus inicios del fútbol y reiteraron la importancia del apoyo desde el núcleo familiar para que las niñas puedan alcanzar sus sueños y no tener barreras en su hogar.
En el caso de Vanessa Córdoba, quien actualmente juega en Atlético Nacional, manifestó que siempre tuvo el apoyo para jugar al fútbol, pues su padre, Óscar Córdoba, quería que sus hijos siguieran sus pasos. De hecho, fue ella la que se alejó un poco, al principio, de la pelota, pero luego no pudo soltar los guantes y defender el arco. Sin embargo, reconoce que todavía hace falta muchos estudios para que las niñas se puedan formar adecuadamente en el fútbol y dejar atrás el pensamiento, en el caso de las porteras, que el arco “debería ser más pequeño para ellas”.
Por su parte, Nicole Regnier, cuando dijo a sus seis años que quería ser futbolista, no la tomaban enserio y tuvo que jugar con niños hasta casi los 14 años. Recordó que las personas asociaban a las niñas que querían jugar fútbol con comportamientos “marimachos” y no era “bien visto”. En el 2013, cuando fichó por el Atlético de Madrid, tenía un salario de 800 euros mensuales y, según contó, €500 los gastaba en el arriendo y le era difícil llegar a final de mes, incluso compraba en un supermercado una caja de cereal para alimentarse, evidenciándose las brechas salariales entre una mujer y un hombre en ese deporte.
Ahora, Regnier reconoce que esas condiciones han cambiado un poco y ahora colombianas como Linda Caicedo (Real Madrid) o Leicy Santos (Atlético de Madrid) pueden vivir cómodamente en España y prepararse adecuadamente en el fútbol femenino.
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Por eso, la Copa Libertadores 2023 es más allá de los 90 minutos reglamentarios que disputarán los equipos de 10 países. Muchas niñas y jóvenes podrán identificarse, ver a su ídola y soñar con ser una jugadora profesional.
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