Ha pasado un mes desde que un derrumbe bloqueara lavía Bucaramanga - Barrancabermeja, exactamente a la altura del kilómetro 42, y la situación sigue sin resolverse, afectando gravemente a los negocios locales y al sector turístico de la región.
Los restaurantes, hoteles y otros negocios que dependen del flujo constante de visitantes y turistas por esta vía han experimentado una disminución significativa en sus ingresos, lo que ha llevado a muchos de ellos a tomar medidas drásticas.
“No nos han solucionado nada, los comerciantes como nosotros estamos quebrados completamente. Incluso, hay unos dueños de granjas que han preferido venderlas porque no hay como pasar alimentos. Estamos perjudicados y nadie soluciona”, indicó Luis Alfonso Pinilla, propietario del famoso restaurante Brisas.
La situación es especialmente crítica para los negocios ubicados en la vía entre Bucaramanga y Barrancabermeja, quienes han visto cómo sus ingresos se reducen en más de un 80%.
Ante esta situación, los habitantes de la zona y los empresarios afectados han protestado, exigiendo soluciones urgentes por parte de las autoridades.
"No podemos seguir así, necesitamos que se haga algo ya. Muchos de nosotros estamos al borde de la quiebra y no podemos esperar más", señaló uno de los manifestantes.
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