Alcaldes vecinos de Hidroituango refuerzan controles por salida masiva de trabajadores

Desde este fin de semana comenzarán a llegar a sus municipios de residencia el primer grupo de los 1.000 trabajadores de Hidroituango que, tras confirmarse que no tienen COVID-19, saldrán de la obra mientras se atiende el brote del virus que hay en el proyecto.De acuerdo con EPM, a la fecha hay 300 contagios informados de los cuales 229 están activos (uno de ellos en hospitalización general) y 71 recuperados. Así mismo, se han adelantado 3.710 pruebas de coronavirus de las cuales algunas están pendientes por sus resultados.Más información: Este lunes se levanta cuarentena en parte de la comuna Santa Cruz de MedellínPara atender precisamente esta contingencia sin poner en riesgo a los no contagiados, la entidad avanza en la reducción de personal de varios frentes de obra al mínimo operacional posible, por lo que una parte considerable de los empleados llegará a sus municipios de residencia, los cuales son en su mayoría los vecinos de la hidroeléctrica en construcción.Mauricio Mira, alcalde de Ituango, contó que tienen un estimado de 75 trabajadores de Hidroituango que llegarán a su municipio, donde deberán cumplir un aislamiento mínimo de 7 días.“Nosotros hacemos seguimiento al protocolo tanto de los empleados como de sus familias, que cumplan el aislamiento y para ello estamos en el proceso de contratar un personal médico. Sabemos que hay 600 trabajadores de nuestros municipio allá en la obra, pero no todos van a salir”, contó Mira.Por su parte, Astrid Chavarría, alcaldesa de Toledo, contó que están a la espera del reporte final por parte de EPM para conocer cuántos de los 250 toledanos que estiman trabajan en la obra, llegarán a su territorio.“EPM antes de enviar alguno de sus funcionarios o empleados en el proyecto nos envía sus datos y con eso lo esperamos en el puesto de control, donde se registra y es enviado a cuarentena”, agregó Chavarría.Miguel Peláez, alcalde de Yarumal, contó que en su caso la llegada de empleados avanza de manera gradual y cada traslado ha sido informado por EPM para hacer el respectivo seguimiento.“Ningún empleado se viene por su cuenta propia ni en vehículos diferentes al que les asigna el proyecto. Una vez llegan al municipio, nos avisan para hacerles el seguimiento y terminar la cuarentena en su residencia”, dijo Peláez.Así mismo, según EPM, un grupo de 350 trabajadores hará primero un aislamiento individual en los campamentos Villa Luz y Tacuí, luego se practicarán una nueva prueba para descartar la presencia del virus y recibir la aprobación de salida. Cada empleado deberá tener entre dos o tres pruebas negativas antes de abandonar el proyecto.Se espera que la salida de estos 1.000 contratistas se complete al finalizar el próximo mes de julio.