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La Gobernación de Santander ha reforzado las medidas de monitoreo sobre los embalses, ríos y otras fuentes de agua del departamento, con el fin de mantener un control riguroso sobre los niveles hídricos.
Tras evaluar el estado actual de los acueductos en la región, las autoridades departamentales emitieron un mensaje de tranquilidad, asegurando que, por el momento, el suministro de agua se encuentra funcionando con normalidad.
A pesar de este reporte positivo, las autoridades hicieron un llamado a la ciudadanía para que adopten prácticas de consumo responsable del agua.
La Oficina para la Gestión del Riesgo de Desastres advirtió que un uso irracional del recurso podría generar problemas de escasez en el futuro. A modo de ejemplo, señalaron la situación que enfrenta Bogotá, donde, debido al desabastecimiento, se han implementado límites de consumo en el servicio de acueducto.
"No tenemos reportes de desabastecimiento en los embalses ni de disminución en los niveles de los ríos principales del departamento", aseguró la Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres.
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Eduard Jesús Sánchez Ariza, jefe de dicha oficina, informó que se trabaja de manera conjunta con los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo para realizar un monitoreo constante y evaluar el estado de las fuentes hídricas. “Ríos clave como el Carare, Opón, Magdalena y Sogamoso se encuentran en niveles estables, por lo que no se han emitido alertas”, añadió.
Las recientes lluvias en el departamento han contribuido a mantener en buen estado las reservas y fuentes de agua, lo cual favorece la situación actual.
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