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El activista Víctor Daniel Pino Villegas siente que volvió a nacer el pasado miércoles, luego de que literalmente le tocó hacerse el muerto para que los delincuentes que lo atacaron a tiros esa noche no siguieran disparando y lograran su objetivo: silenciarlo de una vez por todas para que cesaran sus polémicas denuncias.
A la víctima, de 41 años, le interceptaron cuando se movilizaba en un carro por la avenida de El Platanal, en la entrada al barrio Manuela Beltrán de Soledad. Cuenta que allí, en un semáforo, los pistoleros le apuntaron en la cabeza y le dispararon, ocasionándole una herida en el rostro.
"Sentí que me impactó la cara, caí en el carro y en una de las detonaciones escuché la voz que decía: 'esto te pasó por sapo'", narró.
"Entonces, en medio del susto, me hice el muerto ahí en el carro y esperé unos segundos hasta que mucha gente llegó a socorrerme y me llevaron a la clínica", recordó.
Desde una clínica de Barranquilla donde aún permanece hospitalizado, Víctor cuenta que este ataque se veía venir, porque en múltiples ocasiones había sido víctima de amenazas por redes sociales, las mismas plataformas por las que a diario suele crear contenidos con denuncias ciudadanas sobre irregularidades en el Atlántico. Afirma que las autoridades no lo respaldaron cuando pidió ayuda.
"Yo puse la denuncia en la Fiscalía y la Fiscalía archivó la denuncia, porque no encontraba que esas amenazas pudieran atentar contra mi vida y, como pueden ver, las amenazas se cumplieron (...) todo por alzar mi voz en contra de las cosas que no se han hecho bien", dijo.
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A raíz de este atentado, Víctor volvió a presentar la denuncia ante la Fiscalía y espera que pronto den con los responsables de este intento de asesinato.
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