El presidente Gustavo Petro continúa pronunciándose sobre los asuntos del Gobierno distrital relacionados con una posible crisis por escasez de agua. Esto se debe a que el Fenómeno de La Niña no ha traído las lluvias esperadas para esta época del año.
Por lo tanto, a partir del próximo 29 de septiembre, entrará en vigor un nuevo esquema de racionamiento de agua en Bogotá. El alcalde Carlos Fernando Galán advirtió que cuando el sistema Chingaza alcance el 36 % de su capacidad, las medidas serán más restrictivas.
En respuesta a esto, el presidente Petro propuso una ley concertada para desestimular la urbanización en Bogotá y fomentar el desarrollo en otras cuencas hidrográficas. El mandatario insiste en que el problema radica en que la ciudad se ha expandido en la Sabana sin tener la capacidad suficiente para abastecer de agua a todos los capitalinos.
“Se está quedando sin agua por la codicia, no de la población bogotana, sino de su capa dirigente, que decidió expandir la ciudad en un lugar con tan escasos recursos hídricos como la Sabana, construyendo sin tener en cuenta que tanta población necesita agua. Era una estupidez hacerlo sin asegurar el suministro”, afirmó el presidente hace varios días.
Hoy, a través de su cuenta de X, lanzó esta propuesta y aseguró que es fundamental entender la verdadera causa de la reducción de agua para tomar las medidas necesarias.
“Unas de largo plazo, otras de corto plazo: desestimular la urbanización y estimularla en otras cuencas hidrográficas. Propongo una ley concertada. Traer la selva amazónica hacia la cordillera mediante pactos con el campesinado. Utilizar el agua de lluvia en el urbanismo, rehacer la cuenca alta del río Bogotá para su uso como agua potable en la ciudad. Considerar una mayor utilización del agua para energía, utilizando agua potable y reemplazando esa energía hídrica por energía solar”, escribió el mandatario.
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