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Luego de un trabajo de investigación fueron capturados en el sur de Bogotá dos uniformados de la Policía junto con otros tres delincuentes por ser los responsables de vender licor falsificado en bares y discotecas de la localidad de Kennedy, específicamente en el sector de los sitios de comercio ubicados en la avenida Primero de Mayo.
Las tres personas y los policías delinquían para una peligrosa organización conocida como Serapis. Los uniformados, de acuerdo con la Fiscalía, al parecer permitían la venta libre de las bebidas adulteradas y el funcionamiento de los establecimientos nocturnos hasta horarios no establecidos.
Además, eran los encargados de alertar sobre los distintos operativos y controles que realizaban las autoridades locales en el sector, con el fin de que los dueños de los bares y discotecas que tenían el licor adulterado los escondieran para evitar que fueran descubiertos.
Un fiscal de la seccional Bogotá, de acuerdo con la Fiscalía, les imputó a los capturados de Serapis los delitos de concierto para delinquir, cohecho, y corrupción de alimentos, productos médicos o material profiláctico.
Por otro lado, a los uniformados de la Policía de Bogotá, identificados como Mauricio Andrés López y Nora María Pardo Cuadrado, el fiscal les formuló cargos por asociación para la comisión de un delito contra la istración pública.
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