En búsqueda de un espacio de diálogo con los artistas de la ciudad, este miércoles 15 de enero, a las 6:00 de la tarde en la estación Poblado del Metro, la Secretaría de Cultura de Medellín convocó a los grafiteros congregados en Mesa Graff y en general a quienes conforman el sector gráfico urbano para abordar la situación que ha generado controversia en las últimas semanas en la ciudad.
Tras ser borrados varios grafitis en la avenida Paralela y en la autopista Norte, cerca de la Terminal del Norte, este último en homenaje a las mujeres buscadoras de sus familiares desaparecidos en La Escombrera, se espera que en este encuentro con la alcaldía se lleguen a acuerdos. Esto, incluso, después de que se repintara, esta vez sí con permisos, en ambos costados de esta vía a la altura del deprimido.
Santiago Silva, secretario de Cultura de Medellín, manifestó que en la primera ocasión que fue pintado el mural donde decía “Las cuchas tienen razón” no se solicitaron los permisos correspondientes y que ello acarrea, no solo que pueda ser borrado, sino que, como consecuencia de ello, haya dificultades de seguridad, afirmando que el pasado domingo, en medio de esta actividad, se registraron tres accidentes de tránsito en el sitio.
También apuntó que el espacio de Mesa Graff se rompió en la anterior istración, en el año 2021 y fue retomado por esta Alcaldía en el primer año de gobierno.
"Para intentar ver cómo establecimos canales de comunicación y ver cómo lo hacemos. El acuerdo nos plantea una situación que es un poco particular y es que los permisos que se otorgan en la ciudad solamente se otorgan por seis meses. Tiene una explicación en que a los mismos artistas también les interesa poder estar renovando los espacios. Nos implica otra cosa y es que el procedimiento de pedido de permisos y la mesa en la que se concierta y se conversa estas cosas se rompió en 2021", detalló Silva en Blu Radio.
Por su parte, el docente Rafael Núñez, uno de los convocantes a pintar este mural en la primera ocasión, señaló que en una democracia no se debe pedir permiso porque existe la libertad de expresión.
"El debate se da por la memoria, ¿cierto? Más allá de si es el graffiti, el arte, el libro, es la obra de teatro, lo que sea la memoria. Nosotros lo que hicimos es lo que se debía hacer, que ahora está en la discusión. Para las democracias no es válido pedirle permiso a quien tiene el poder para hacer una movilización. Lo que se hace es una notificación de que vamos a hacer una movilización", expuso en Mañanas Blu.
Más allá de ello, Medellín cuenta con el acuerdo distrital 010 de 2020, que establece lineamientos claros para el arte urbano, mientras que la Ley 1801 de 2016 regula el comportamiento ciudadano y sanciona los graffitis no autorizados.
En la capital antioqueña, desde 2020, se han impuesto más de 400 comparendos por este motivo, y en solo 2024 se registraron más de 64 medidas correctivas por esta razón, lo que según el concejal Alejandro de Bedout “refleja un desafío persistente: diferenciar entre arte y vandalismo”.
Frente al homenaje que se hace a las víctimas de desaparición forzada, el secretario de Paz y Derechos Humanos argumentó que el pasado 9 de octubre la Alcaldía develó junto a las mujeres buscadoras y la JEP un mural que les hace honor en la terminal del Norte.
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