Sigue siendo crítico el panorama de orden público en el nordeste de Antioquia por cuenta de la persistencia en las acciones violentas que diferentes grupos armados llevan a cabo en medio de confrontaciones por el control territorial.
Y es que en las últimas horas comunidades rurales del municipio de Segovia han reportado fuertes combates entre ilegales desde el mediodía de este 7 de febrero en inmediaciones de la vereda Altos de Manila, límites con el sur del departamento de Bolívar donde también fue identificada la presencia de una avanzada de hombres fuertemente armados.
Pero además, según denunció el defensor de derechos humanos Óscar Yesid Zapata, la situación se extendió hasta la vereda Cancha Manila donde en un retén instalado presuntamente por hombres del Clan del Golfo fueron secuestradas cerca de 30 personas, varias de ellas aún seguirían en poder de este grupo y dos habrían sido asesinadas.
La dificultad para llegar hasta el territorio pero además la orden de cortar los servicios de telecomunicaciones en la zona han dificultado la posibilidad de obtener información oportuna, detalló Zapata, acerca de la problemática sobre la que hay alertas emitidas desde mediados del año 2022.
"Los hechos violentos vienen desde junio del año pasado donde ocurrieron varios desplazamientos forzados en Bocas de Chicamoqué, lo qué pasa aquí, en estos momentos, es que esas comunidades están completamente abandonadas", declaró.
Organizaciones sociales temen que en las próximas horas ocurran desplazamientos masivos de comunidades huyendo de estas confrontaciones que se presumen se dan entre una alianza del ELN y las disidencias del Farc contra del Clan del Golfo.
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