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Voces de rechazo y reclamo llegaron desde todos los sectores del país después de que Panam Sports confirmara que los Juegos Panamericanos no se harán definitivamente en la ciudad de Barranquilla, en Colombia.
En las críticas por la larguísima cadena de incumplimientos del Estado colombiano con el contrato de los Panamericanos, una de las voces más representativas del petrismo en Barranquilla, Agmeth Escaf, se ha pronunciado en reiteradas ocasiones después de conocerse la pérdida definitiva.
Para Escaf es claro que fue la “incompetencia de la ministra de Deporte” la que llevó al país a la posición en la que está a la fecha, y que no va a “defender lo indefendible”, porque la única razón por la que el país perdió la sede fue porque “el Gobierno incumplió”.
Entiendan algo: La sede se perdió porque el gobierno incumplió. Así de sencillo. Yo sigo firme con Gustavo Petro, y estoy metido en toda clase de líos jurídicos por apoyarlo, pero no por eso voy a defender lo indefendible. Si por esta posición van a tratarme de bandido y de Manguito (cosa que ya ni me sorprende), y van a tildar a toda una ciudad de corrupta y bruta, revísense. Están muy mal.
Entre tristeza e indignación por haber quedado “como payasos” ante el mundo, el representante a la Cámara por el Pacto Histórico rechazó el incumplimiento y exigió que el Gobierno, como mínimo, le pida perdón a la capital del Atlántico.
“Se trataba de un contrato internacional con cláusulas muy claras que debíamos cumplir, que debíamos respetar, y no lo hicimos. Quedamos ante el mundo como un país poco serio. (…) Aquí solo perdió Barranquilla y lo mínimo que se merece mi ciudad es que el Gobierno le pida perdón”, escribió en su cuenta de X.
No me vengan con el cuento que soy charista como si esos juegos fuesen de los Char o como si solo esa familia necesitaba que cumpliéramos con lo firmado y pactado. Los Char seguirán gobernando y seguirán millonarios con juegos o sin juegos. No pierden nada. Aquí solo perdió Barranquilla y lo mínimo que se merece mi ciudad es que el gobierno le pida perdón.
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En la misma línea de reacciones a la decisión de Panam Sports, reconoció que, aunque “el primer incumplimiento se dio en el Gobierno de Duque, fue la inoperancia por parte del Ministerio del Deporte la que llevó al país y a la ciudad a perder la sede de los juegos.
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“La sede la perdimos justamente porque en diciembre MinDeporte no hizo ningún pago, se pasó por el forro el acuerdo. Es decir, lo pactado a final de año en este gobierno se incumplió y con eso demostramos que no tenemos seriedad, que somos negligentes, poco confiables”, puntualizó.
Lo peor: la ministra, teniendo la plata en su cartera, no pagó en diciembre porque según sus propias palabras le dio miedo girar tanta plata. Una incapaz en todo el sentido de la palabra. Y sigue ahí, en su cargo, como si nada.
En ese sentido, su mensaje continuó pidiéndole al presidente Gustavo Petro que reconozca con “humildad el error y no buscar culpables en otro lado”, en medio de la defensa del jefe de Estado a su Gobierno y los señalamientos al de Duque sobre la pérdida de la sede.
“Lo mínimo es resarcir el daño, que sí lo hubo, y reparar a una ciudad que te apoyó para que tú estuvieras donde estás. (…) Es inaudito que esta barbaridad haya pasado y que la perjudicada sea precisamente una ciudad que se la jugó toda por ti”, solicitó Escaf.
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