En entrevista con Mañanas Blu, el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, reveló detalles sobre el plan del Gobierno para combatir la violencia y la delincuencia juvenil en el país. Según el ministro, se implementará un programa que consiste en pagar a los jóvenes para que abandonen el camino de la delincuencia y se enfoquen en el estudio y la formación académica.
El anuncio surge en medio de una situación crítica en Buenaventura, la ciudad puerto más importante del Pacífico colombiano, donde bandas y fuerzas ilegales, en alianza con el narcotráfico, han desatado una ola de violencia. El presidente Gustavo Petro, durante su visita a la región el pasado 7 de julio, afirmó: "Vamos a pagar por no matar”, una frase que causó polémica.
"Ese programa se va a complementar con lo que llamamos nosotros jóvenes en paz; serán miles de jóvenes a los que les vamos a pagar por no matar, por no participar de la violencia y por estudiar; les vamos a dar una ayuda para que entren al SENA, que aquí tiene un compromiso que tiene que cumplirse, y para entrar a la universidad", señaló Petro.
El ministro del Interior explicó que el objetivo del programa es brindar oportunidades a los jóvenes que se encuentran en situaciones de riesgo, quienes, debido a la falta de opciones, son susceptibles de ser reclutados por bandas criminales. Asimismo, aclaró que el término "no matar" es una metáfora, ya que busca evitar que los jóvenes se involucren en actividades violentas y delictivas.
“El no matar es una metáfora. Los jóvenes en Colombia, cuando no tienen oportunidades, terminan siendo coptados por quienes desde la ilegalidad les generan unas oportunidades terribles porque son oportunidades de entrar a bandas que su lógica es la violencia y terminan enfrentados jóvenes con jóvenes matándose”, dijo.
El programa, señaló el funcionario, consiste en identificar a los jóvenes en riesgo y ofrecerles un apoyo económico condicionado. El dinero se destinará a su formación en el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) o en universidades, con el objetivo de brindarles nuevas oportunidades y alejarlos de entornos delictivos. Además, se buscará la colaboración de actores locales, como la iglesia y universidades, para trabajar de manera conjunta en la implementación del programa en Buenaventura.
Velasco precisó que el pago mensual será cercano a un millón de pesos y tendrá una duración inicial de un año, sujeto a evaluación: “Es cercano al millón de pesos, no es para toda la vida, es mientras los sacamos y logramos que ingresen a alguna actividad académica, algo que los aleje de espacios delincuenciales. Inicialmente planteamos un año y vamos evaluando el desarrollo del programa”.
La selección de los beneficiarios, según explicó, se realizará en función del riesgo que enfrentan y de su potencial para ser captados por organizaciones criminales. Asimismo, se trabajará con organizaciones locales y se establecerá un seguimiento constante para garantizar el cumplimiento de las condiciones del programa.
En cuanto a la inversión necesaria para llevar a cabo esta iniciativa, el ministro itió no conocer la cifra exacta, pero enfatizó que será significativa. Aunque se estima que, solo en Buenaventura, podrían ser necesarios entre 5.000 y 6.000 millones de pesos mensuales. Sin embargo, el objetivo del programa no se limita solo a esa ciudad.
El programa ha despertado ciertas críticas, ya que algunos consideran que podría ser percibido como discriminatorio para aquellos jóvenes que nunca han incursionado en la delincuencia. Sin embargo, el ministro enfatizó que el Gobierno está trabajando en un Plan Nacional de Desarrollo que busca brindar educación gratuita en universidades y fomentar el emprendimiento. También se mencionó una futura reforma de la educación superior para motivar a los jóvenes a seguir estudiando.
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