Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Las ventas de alimentos y víveres en Colombia cayeron por primera vez desde marzo del año pasado y las señales hacia el futuro no son nada alentadoras.
Según la Encuesta Mensual de Comercio del Dane, la venta de víveres cayó un 0.6 % en noviembre; sin embargo, eso no es lo único que cae: las ventas de productos de aseo para el hogar tuvieron una reducción de casi un 15 % y las ventas de los supermercados se estancaron en todo el país.
Los que conocen del tema tienen dos hipótesis. La primera tiene que ver con el efecto de la inflación. Hay que tener en cuenta que el Dane mide los comercios formales así que una de las posibilidades es que las familias estén migrando del almacén de cadena hacia la tienda de la esquina donde pueden comprar, por ejemplo, un huevo y no una cubeta.
Además, los hogares pudieron adoptar otras estrategias de supervivencia ante la carestía, como comprar menor cantidad de algunos productos, o incluso eliminar de su lista de mercado otros artículos cuyos precios han aumentado significativamente.
Sin embargo, hay una segunda teoría y tiene que ver con el regreso a la presencialidad. Al pasar más tiempo fuera del hogar no hace falta llenar tanto la nevera porque se cocina menos y muchos volvieron al corrientazo, el puesto de empanadas o el restaurante.
Las ventas totales del comercio apenas aumentaron un 1.7 % en noviembre. Le fue muy bien a los sectores relacionados con la temporada de fiestas como licores y cigarrillos, equipos de sonido y cosméticos; sin embargo, otros sectores están viendo un panorama gris, entre ellos los electrodomésticos y los vehículos.
Publicidad
“Al quedarnos en casa comíamos más allí y teníamos un gasto en desinfección mucho más grande porque estábamos en las partes finales de la pandemia y al compararnos con esos países evidentemente hay una caída; sin embargo, vale la pena anotar que el aumento de precios en esas categorías también ha causado un impacto importante. Hay hogares que han reducido su gasto en productos de aseo del hogar intentando ajustar el bolsillo e inclusive cambiando de marcas y de canales de compra”, dijo el presidente de Raddar, Camilo Herrera.
La Bitácora Económica de Fenalco muestra que, si noviembre fue malo, diciembre fue peor para el comercio, y el 2023 pinta como un año tan difícil que una de las principales recomendaciones a los comerciantes es no caer en la tentación de venderle al fiado a sus clientes (que le están huyendo a las tarjetas de crédito).
Publicidad
Además de las bajas ventas, los comerciantes vienen lidiando con una menor rentabilidad y un 52 % de los comerciantes reportó una reducción en los márgenes de venta.
“Este hallazgo indica que el comercio no le trasladó totalmente al consumidor final los reajustes de precios de sus proveedores. La reducción en los márgenes de rentabilidad es algo que el país debe ponderar. De no ser porque los minoristas sacrificaron márgenes a lo largo del año anterior, la inflación hubiera sido mayor”, indicó la publicación.
Le puede interesar: Subieron los peajes, pese a decreto del Gobierno, que aún no ha sido firmado
Únase a nuestro canal de Whatsapp y manténgase al tanto de los hechos más relevantes.
✔️ Síganos en Google Noticias con toda la información de Colombia y el mundo.