Así fue el negocio de la reventa de boletas para las Eliminatorias de Rusia

Más de 14.000 boletas del partido Colombia-Brasil, en el que la tricolor se jugaba su cupo al mundial de Rusia, terminaron en manos de revendedores con la complicidad de las empresas Ticket Shop, Ticket Ya y de la Federación del Fútbol Profesional Colombiano, de acuerdo al informe con el que la Superintendencia de Industria y Comercio podría sancionar a los responsables.Ticket Shop fue la compañía que se ganó el concurso para vender las boletas y le ponía la cara a los hinchas. Sin embargo, era Ticket Ya la que manejaba el negocio de la reventa.Según el expediente, 5 meses antes del partido, se decidió en una reunión que "Ticket Shop no podía vender ni entregar boletería al público".Todas las entradas que debían ofrecerse al público fueron entregadas a Ticket Ya y a sus socios, entre ellos, Elías Yamhure y el dirigente del fútbol Rodrigo Rendón (q.e.p.d)."La boleta que costaba 60.000 pesos Ticket Ya la vendió, por lo menos, en 270 mil pesos (…), se resalta que en su mayoría fueron compradores mayoristas (no al detal) de lo que se concluye que estas eran compradas para la reventa en otro eslabón en la cadena", indica el informe.Ni siquiera los jugadores se salvaron: el informe da cuenta de que muchos de ellos protestaron porque no les dieron una sola boleta para que sus familias pudieran verlos en el último partido de locales. No solo fue ese partidoEl desvío masivo de boletas comenzó desde el primer juego de las Eliminatorias.Le puede interesar: Es un privilegio ser dirigido por Maradona: Jonathan Agudelo Según el expediente en el partido contra Perú se entregaron 3.000 boletas a Ticket Ya, en el juego con Argentina fueron más de 3.600 y en el caso de Ecuador fueron más de 3.700. A medida que se acercaba la definición de las Eliminatorias la cuota aumentó: más de 4.200 boletas desviadas en el partido contra Uruguay y más de 6.000 en el juego contra Chile.El modus operandi era similar en todos los casos: Ticket Shop le entregaba a Elías Yamhure un número predeterminado de boletas que luego pagaba Ticket Ya a un 'precio preferencial'. La entidad asegura que esas boletas eran destinadas directamente al mercado de la reventa.El pecado original Según el expediente la Federación Colombiana de Fútbol hizo una invitación pública para asignar el contrato de las boletas cuando en realidad ya tenía decidido a quién le entregaría el contrato: A Rodrigo Rendón y Elías Yamhure (los dueños de Ticket Ya).Ticket Ya era una empresa nueva que no tenía cómo cumplir los requisitos que puso la federación, por eso, sus socios aron a Ticket Shop (que al menos tenía experiencia) para que se ganara el concurso, y se lo ganó.Esto a pesar de que la oferta fue corregida después de la fecha de cierre y de que otras empresas tenían puntajes más altos, según los criterios que estableció la propia federación.Es más, Ticket Ya y Ticket Shop firmaron un acuerdo sobre cómo manejarían el negocio de la boletería antes de que se ganaran el contrato. Ticket Ya pondría 10.000 millones de pesos y Ticket Shop pondría la experiencia. Al final Ticket Ya no puso un peso: su socio tuvo que hacer un préstamo con la banca comercial que se pagó con las ganancias del contrato.

Así fue el negocio de la reventa de boletas para las Eliminatorias de Rusia

Para el partido Colombia-Brasil no salió una a la venta y ni siquiera los jugadores lograron conseguir entradas a los precios oficiales.