La alerta temprana emitida en los últimos días por la Defensoría del Pueblo revela que más de 1.800.000 habitantes de Cali está en riesgo inminente por la presencia en la ciudad de milicias del ELN, disidencias de las Farc y carteles del narcotráfico colombianos y mexicanos.
El anuncio se dio tras el atentado terrorista registrado en inmediaciones a Puerto Rellena, suroriente del Distrito, donde un camión del Esmadfue atacado con explosivos dejando como saldo 13 policías heridos.
El alcalde Jorge Iván Ospina aseguró que esas organizaciones criminales superan la capacidad de intervención de la Alcaldía y, por eso, está pidiendo al presidente de la República un consejo de seguridad urgente en Cali, inclusive, a través de una solicitud por escrito.
"Hemos convocado a un consejo nacional de seguridad en nuestro territorio, lo más pronto posible. Es imprescindible que el señor ministro de Defensa, el fiscal general de la nación, la procuradora y todos los organismos de inteligencia del estado en su más alto nivel, estén en la ciudad de Cali para intervenir la amenaza", dijo el mandatario.
"Se trata de organismos de carácter nacional y trasnacional que superan las capacidades, el ejercicio e intervención del territorio y la Alcaldía. Debemos discutir entre todos de qué manera se puede contener estos aparatosos irregulares y proteger a la ciudadanía", agregó Ospina.
La petición del alcalde de Cali fue criticada por algunos de sus contradictores, como el senador Gabriel Velasco, quien le recordó que el pasado 8 de enero, un día después del atentado del ELN, no asistió a un consejo de seguridad con presencia de las autoridades nacionales como el ministro de Defensa Diego Molano, por estar en Cartagena.
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