La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, expresó su frustración y sentimiento de abandono por parte del Gobierno nacional en cuanto a la seguridad en la ciudad, las declaraciones las da luego de un violento atraco que ocurrió en la carrera Séptima con calle 98. López hizo énfasis en que, a pesar de que la Policía Nacional es una entidad de alcance nacional y su financiamiento es responsabilidad del Ejecutivo, los resultados obtenidos hasta ahora han sido decepcionantes en la capital.
En respuesta a estas declaraciones, la Policía Metropolitana de Bogotá afirmó que se había acordado financiar la formación de 1.500 patrulleros, pero en una cláusula se estableció que la Policía Nacional no podía garantizar que todos los estudiantes aprobaran el proceso de formación, ni se comprometía a reemplazarlos en caso de no hacerlo.
En cumplimiento de este convenio, explicó la MeBog que se graduaron y entregaron a la istración distrital 1.399 uniformados, y se explicó la razón por la cual no se hizo lo mismo con los 101 restantes: 40 decidieron retirarse y 61 fueron aplazados en su proceso de formación.
“En conclusión, la institución cumplió con la totalidad del convenio y, tal como se le ha hecho saber a la istración distrital, la reducción de uniformados, no solo en Bogotá, sino en el resto del país, se explica en la dinámica institucional que señala cómo el retiro de personal ha sido mayor al que ha ingresado”, indicó la Policía en su comunicado.
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