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No para la consternación en Medellín luego del hurto a una bodega de oro que terminó en un cinematográfico tiroteo. La rápida acción de las autoridades evitó que ocurriera una mayor tragedia ante la vista de decenas de ciudadanos.
En exclusiva conNoticias Caracol, un policía, que mantuvo en secreto su identidad, explicó que para llegar al lugar del robo se realizó una operación desde la Policía Central de Medellín.
Fue en la carrera 48 con calle 16 a dónde llegaron todos los cuadrantes de la zona a rodear el sitio.
Mientras una docena de policías persiguieron y capturaron a integrantes de la banda, otros realizaban investigaciones que los llevaron a encontrar a los responsables: la banda Robledo.
“Se dedican al narcotráfico, microtráfico, extorsiones. El ala de este caso es la de hurtos, estas personas dedicadas a este delito principalmente se focalizaban en hurtos de gran cuantía sobre los mil millones de pesos. Hacían un estudio previo, una verificación y sobre todo buscaban una información efectiva por parte de alguien de dónde se iba a cometer el hurto”, manifestó en su testimonio uno de los policías.
Para los investigadores de la Policía Nacional, alias ‘Pepe Chancleta’, jefe de la banda los Robledos, es quién estaría detrás del crimen.
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“Él es el que ordena y distribuye los roles y las responsabilidades para efectuar cada uno de estos delitos. Es así que el ala de hurtos tiene aproximadamente entre unos 15 a 30 hombres”, precisaron.
Los criminales viajaron desde varias ciudades del país para cometer el hecho, tres de los capturados provenían de Bogotá, uno de Sucre y uno de Huila.
Según lo dicho por los policías, fue desde la capital desde donde trajeron los chalecos, prendas de vestir y vehículos que utilizaron durante el robo.
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“En el barrio 12 de octubre de la ciudad de Medellín, fue donde se reunieron para distribuir, planear y ejecutar cada uno de los roles que iban a desempeñar durante el hurto”, dijo uno de los policías a Noticias Caracol.
Las armas de largo alcance que se pueden apreciar en los videos en redes sociales fueron traídas desde el Valle del Cauca "mediante unas caletas improvisadas de los vehículos, donde desarman las armas de fuego, especialmente los fusiles, y son traídas hasta Medellín”.
Finamente, la Fiscalía confirmó que aquellos que escaparon lograron llevarse 3.000 gramos de oro, una suma evaluada en más de 500 millones de pesos.
Las autoridades anunciaron una recompensa de 50 millones de pesos a quienes den información que ayude a la captura de los demás delincuentes.
Vea el video:
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